Senadores libertarios y radicales bloquearon ayer el intento del kirchnerismo de tratar sobre tablas modificaciones en el sistema de movilidad jubilatoria. En cambio, se impuso el pedido de la UCR para que la reforma previsional se debata en una próxima sesión, con fecha a definir.
Aprobada por mayoría simple, la moción radical requiere dictamen de comisiones para avanzar con la discusión del proyecto en el recinto. Algo a lo que se opuso el bloque de Unión por la Patria, que reclamó conocer la fecha exacta de la próxima sesión e insistió con la necesidad de darle tratamiento “urgente” al tema.
Pese a ese rechazo, en el peronismo dijeron estar de acuerdo con el nuevo sistema jubilatorio, que ya recibió media sanción en Diputados. El texto plantea la combinación entre el índice de inflación y la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE), con un ingreso extra del 8,1% para los jubilados. La propuesta incorpora además un aumento anual en el mes de marzo, que reconocería un incremento del 50% de la variación del RIPTE por sobre la variación de la inflación del año calendario anterior.
“La actualización para los jubilados necesita un tratamiento urgente”, planteó ayer el senador por Formosa de Unión por la Patria, José Mayans, y advirtió que “si se dilata el tema, como es la intención del oficialismo, afecta a todos porque terminarían cobrando el aumento en septiembre”. Por eso, machacó con el pedido de tratar “ahora, sobre tablas, el expediente”, exigió, para después oponerse al proyecto radical para patear el debate hasta una fecha desconocida.
Al cruce le salió el senador radical por Corrientes de la UCR, Eduardo Vischi: “Esta es una sesión especial, es una falta de respeto introducir temas. Lo obvio es que en la próxima sesión lo tratemos con o sin dictamen”, anticipó y le pidió a Mayans que su bloque “acompañe para tener esa reunión especial”. Algo que, como se dijo, no ocurrió.
“El kirchnerismo impidió que se trate con preferencia para la próxima sesión el aumento a los jubilados”, denunciaron después desde la UCR y ampliaron que “la propuesta de nuestro espacio, que recibió el apoyo de distintas bancadas, se vio obstaculizada por los bloques referidos en el kirchnerismo que, carentes de toda autocrítica, bloquearon el pedido impidiendo que se avance con la tan necesaria recomposición”.
Resaltaron, en ese sentido, que “los jubilados necesitan respuestas en un marco de sensatez y viabilidad fiscal. El sistema actual, quebrado e injusto, es producto de décadas de populismo y cortoplacismo impulsado por quienes hoy se rasgan las vestiduras por esta y otras causas, pero rechazan cualquier iniciativa de cambio”.
Los radicales admitieron que el tema “preocupa a millones de argentinos y los pone ante un escenario de incertidumbre”, a la par que subrayaron la importancia de acelerar el debate “para brindar respuestas concretas y sostenibles”.
Los cruces por la reforma jubilatoria colonizaron así la atención de una sesión en la que además se aprobó decretar duelo nacional el 18 de julio por el atentado a la AMIA y, en medio del caso Loan, se trató el proyecto que impone penas de hasta diez años de prisión por el secuestro de niños.