El futbolista Thiago Almada dejará el Atlanta United para emigrar al Botafogo y complicará su participación en los Juegos Olímpicos de París 2024 con la Selección argentina Sub 23 de Javier Mascherano.
El capitán de la Selección Argentina Sub 23 fue transferido por 20 millones de dólares al grupo Eagle Football, y uno de sus posibles destinos y el más cercano es el Botafogo de Brasil.
Este movimiento complica su disponibilidad para la cita olímpica, ya que el torneo no forma parte del calendario FIFA, y dependerá de la voluntad del club brasileño cederlo o no.
Almada, que previamente estuvo en la mira de Boca y sostuvo conversaciones con el presidente Juan Román Riquelme, se despidió del Atlanta United. Su destino inmediato parece ser el Botafogo, antes de posiblemente dar el salto al fútbol europeo, con Eagle Football también propietario del Lyon de Francia y el Crystal Palace.
La situación se agrava con otras bajas en la Selección argentina Sub 23. Alan Varela, por ejemplo, no estará disponible para los Juegos Olímpicos debido a un cambio en el cuerpo técnico del Porto, donde André Villas-Boas decidió no ceder al mediocampista. Ante esta situación, Mascherano podría convocar a Santiago Hezze, campeón de la Conference League con el Olympiacos, como reemplazo.
Además, otros dos jugadores clave que están participando en la Copa América con la selección mayor, Enzo Fernández del Chelsea y Alejandro Garnacho del Manchester United, tampoco recibieron el permiso necesario para unirse al equipo olímpico. Estas ausencias representan un golpe significativo para las aspiraciones del equipo Sub 23.
La incertidumbre sobre la conformación final del plantel sub 23 se mantiene, con la fecha límite para la presentación de la lista de 18 jugadores más cuatro reservas fijada para el 3 de julio. Mascherano y su equipo viajarán a Francia una semana después.