Así, la Cámara de Diputados insistiría con la versión original de la Ley Bases para reponer el Impuesto a las Ganancias de la Cuarta Categoría -aquella que grava el trabajo personal de los argentinos- y la rebaja progresiva en Bienes Personales. La combinación de estos impuestos significa unos $ 70.000 millones -anualizados- en las cuentas de la provincia. Peor hubiese sido un rechazo de Ganancias y la aprobación de la rebaja en Bienes Personales. A Mendoza le habría “costado” más caro.
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Ya sea con matices o con diferencias insalvables, el promedio de la clase política local es consciente de que debe apuntalarse el rumbo productivo de la Provincia de Mendoza: un futuro no muy lejano donde haya minería del cobre con grandes inversiones apoyadas por el nuevo RIGI aun cumpliendo la ley restrictiva 7.722, agro con valor agregado, producción de energías limpias, polos tecnológicos, empresas B, triple impacto y economía del conocimiento.
En los primeros seis meses de esta administración, el gobierno de Cambia Mendoza con los radicales a la cabeza ha conseguido “apuntar” la nave en el camino correcto: nuevo Código de Procedimiento Minero para desmontar el negocio inmobiliario de una minería de fantasía, veintiséis leyes para modernizar el sistema de salud, un trabajoso acuerdo con los intendentes por el reparto de fondos, el convenio con Nación para resucitar catorce obras públicas frenadas por un monto total de $180.000 millones, y lo más importante: la ratificación legislativa de la adenda al convenio por los U$S1.023 millones de Portezuelo del Viento; probablemente el hecho más importante que pueda producir Alfredo Cornejo en su segundo gobierno. Aunque el oficialismo no tiene mayoría en el Senado de Mendoza, donde iguala a 19 votos con la oposición, todas estas leyes salvo una salieron con media sanción del Senado provincial sin necesidad de desempate a través de la vicegobernadora Hebe Casado. Eso habla de acuerdos, que bien hacen falta.
La contracara de la Mendoza pujante no es sencilla. La pobreza creciente se nota en las cifras y en los barrios. El año 2023 terminó con 65 % de pobreza infantil según el INDEC, y en ascenso de acuerdo al observatorio de la UCA. Estamos entre los cinco conglomerados con mayor porcentaje de niños y niñas pobres del país, peor que el conurbano bonaerense. Las imágenes de cuadras de fila para conseguir un plato de comida en Los Horneritos los martes y jueves por la noche lo reflejan. Las historias indignantes y dolorosas de gente que vende la leche que el gobierno nacional distribuyó para chicos con hambre -a las apuradas y con el auxilio de CONIN- eximen de mayores comentarios.
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El mapa social es muy duro: 493.955 personas en Gran Mendoza son pobres a diciembre de 2023, 146.227 son indigentes, 171.000 ingresan en la suma de desocupados, subocupados, u ocupados buscando un segundo o tercer empleo. Por eso es central la responsabilidad en administrar los recursos, como acertar el rumbo local para cuando la economía nacional resucite, si es que ocurre.
El Banco Mundial empeoró su pronóstico sobre la Argentina para este año con caída de -3,5 %. Antes había estimado -2,8 %, pero con repunte del 5 % para 2025. Se supone que cuando llueva sopa, en esta provincia estaremos todos con los cucharones dispuestos.
Ahora, Milei tiene a mano dos de sus herramientas principales, aunque restará un buen rato de discusiones para que se transformen en ley. Los diputados de la oposición dialoguista que apoya al gobierno (entre ellos los mendocinos Lisandro Nieri, Patricia Verasay y Julio Cobos), son proclives a insistir con el proyecto de Bases y Paquete Fiscal sancionados originalmente por la Cámara Baja, incluyendo la reposición de los impuestos a las ganancias y la reducción progresiva de Bienes Personales. Incluso podría haber una ratificación “por partes” (le llaman “mosaico”) de la revisión que hizo el Senado de ambas leyes.
Mendoza radical-libertaria
Mientras todo esto ocurre, el mapa político de Mendoza se va acomodando alrededor de husos horarios radicales y liberales-libertarios, y de grupos demócratas y del PRO que han ido mutando de nombre y sector: son los que estuvieron todos juntos en la primera versión de Cambia Mendoza de 2015, y que luego se fueron apartando. O “los fueron”. El resultado es el mismo.
De aquel frente electoral que apoyó a Alfredo Cornejo para su primera gobernación, hay que contabilizar la escisión de todo o de parte de los demócratas -que se dividieron entre el PD y el Partido Demócrata Progresista- la deflexión de un PRO partido a la mitad, la aparición de La Unión Mendocina como frente multipartidario montado alrededor de Omar De Marchi y un anticornejismo furioso. También se fueron de Cambia Mendoza la Coalición Cívica, los socialistas, que en esta provincia son expresiones menores; mientras que del lado del oficialismo quedaron los empresarios de Activá Mendoza, parte del PRO, por supuesto la UCR como mascarón de proa, el PDP y algunos aliados más.
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La irrupción incendiaria de Javier Milei impactó de tal manera en la política mendocina, que ahora cuatro de los diez diputados nacionales por esta provincia son “liberales” adherentes a Javier Milei: Lourdes Arrieta, Álvaro Martínez, Mercedes Llano y Facundo Correa Llano. Todos del bloque La Libertad Avanza aunque con orígenes disímiles en Mendoza. Los otros seis son radicales y peronistas, por mitades.
El correlato es parecido en la Cámara de Diputados de Mendoza, con siete bloques filo liberales, o casi, que apoyan a Milei. En el Senado local el impacto fue menor y los mileístas que hay están en La Unión Mendocina. Este nuevo mapa tiene proyección en 2025 y 2027.
Los liberales por Luis Petri
A Alfredo Cornejo le ataca una especie de humor ácido cuando escucha hablar de su eventual sucesión, algo que indefectiblemente ocurrirá dentro de tres años. Animal político como es, el gobernador ejercerá el máximo de su poder e influencia local y nacional hasta el último día de su mandato, convencido del rumbo de las gestiones de Cambia Mendoza. En su entorno dicen incluso que es una “falta de respeto” estar hablando de candidaturas mientras hay un gobernador en ejercicio. Nadie duda de la autoridad de quien ocupa el sillón de San Martín. Pero el ajedrez se ha vuelto dinámico y las piezas se mueven en el tablero con rapidez.
El ministro de Defensa de la Nación, Luis Petri, y el intendente de la ciudad de Mendoza, Ulpiano “Yayo” Suarez, aparecen en la vidriera como probables primeras opciones de Cambia Mendoza para 2027. ¿Quién los puso allí? Un poco el voto (uno reelecto, el otro con un gran desempeño en las PASO provinciales), los grupos que los promueven, y finalmente los medios, siempre ávidos de nuevos escenarios.
Una de las empresas de consultoría que mide habitualmente para el Gobierno los tiene a Petri y a Yayo Suarez con imagen positiva equivalente, casi iguales, y con diferencial positivo: esto es, más percepción pública positiva que negativa. Ninguno de los dos habla en público de candidaturas ni sucesiones. Hay quienes dicen que el bajo perfil en este sentido no sólo respondería a convicciones personales -ambos entienden que está muy mal visto hablar de postulaciones ahora- sino a sendas conversaciones que habrían tenido con Alfredo Cornejo.
Luis Petri viene con mucha presencia territorial en Mendoza. La muerte accidental del sargento de paracaidismo Franco Maizarez ocurrida en Córdoba mientras realizaban ejercicios militares privó a los seguidores del ministro de un desfile enorme en la Avenida Emilio Civit por el Día del Ejército, el 29 de mayo último. ¿Alguien le habrá advertido del probable costo de un desfile en el país sin plata? Es probable, aunque igual se hará el 9 de julio en CABA. El acto local fue más austero, en el Cerro de la Gloria, y lo compartió con Alfredo Cornejo. Ocasión imperdible.
Es cierto que Petri y Yayo Suarez sólo hablarán de candidaturas cuando se “habilite” el humor social y las fechas estén cerca. Pero en menos de un año, para la próxima Vendimia, estaremos hablando de la renovación legislativa de 2025. Por eso, conviene poner en relieve algunos movimientos subterráneos.
La semana que viene, probablemente el martes, aparecería un documento fundacional de un nuevo grupo que se llamará “Liberales por el futuro”. El nombre recuerda a la fundación de Luis Petri, “Mendocinos por el futuro” a la que estarán relacionados. Y hay tres caras conocidas allí: el ex titular de Aysam Richard Battagion, el ex subsecretario de Salud Oscar Sagás, y el actual director del Organismo Técnico Criminológico del Ministerio de Seguridad, Diego Arenas.
Battagion, Arenas y Sagás están trabajando para Luis Petri, a quien ven como futuro gobernador de Mendoza. Llegan con un ideario que será interesante de discutir, sobre todo porque puede producir urticaria a peronistas y radicales: apoyan totalmente a Milei y a Luis Petri pero quieren plantear una agenda de “empresa privada” de alta intensidad. Propondrán privatizaciones de Aysam, Mendoza Impulsa, Emesa, IMPSA, para empezar.
Respecto de IMPSA, en el mundillo libertario local manejan versiones de crisis y mala situación, por contratos que la firma no habría logrado cobrar. También tienen para sí que el gobierno de Milei ya tendría comprador para la ex industria de Enrique Pescarmona.
La tarea de los “Liberales para el futuro” no se agota en promover a Petri. Harán un apoyo crítico y con observaciones a la gestión de Cambia Mendoza. Luego, tienen unas dos mil afiliaciones posibles que ahora están en el Partido Demócrata Progresista para ir sumando de a poco a La Libertad Avanza.
Allí su referencia es Lourdes Arrieta, la diputada del patito Kawaii. Una legisladora difícil de clasificar: aparenta poco conocimiento de los temas y cierta frivolidad, pero hacia dentro de la tropa libertaria ejerce con dureza el poder que le han dado Karina Milei y Martín Menem. El sorpresivo y escandaloso reemplazo del titular del PAMI local Carlos Soloa Vacas por David Litvinchuk es prueba de ello.
Arrieta ha sido señalada por todo tipo de líos entre los liberales. El escándalo de los avales truchos, más las acusaciones a su padre y madre y a su hermano Martín han sido la comidilla política de moda. Pero los “petristas” la reconocen como única referencia libertaria en Mendoza, y algo así como el nexo para el ingreso a La Libertad Avanza del grupo Liberales por el futuro que apoya al ministro de Defensa.
Los nuevos aliados de Petri (en realidad lo apoyan desde las PASO del año pasado) tienen otra tarea: serán los encargados de dotar a la diputada Arrieta del bagaje técnico que le estaría faltando en temas centrales de la provincia.
¿Será este grupo un soporte posible para Omar De Marchi? La Unión Mendocina aún debe pasar el trance de los eventuales juzgamientos de algunos de sus precandidatos lasherinos por corrupción, entre ellos Daniel Orozco y Janina Ortiz. Pero ahora el ex diputado y ex intendente de Luján de Cuyo tiene un rol en el gobierno nacional como puente con el Congreso, aunque en esa posición la figura excluyente es el Jefe de Gabinete Guillermo Francos. “En el futuro podremos converger con Omar” dicen quienes trabajan en esta construcción liberal-petrista.
El submarino de Yayo Suarez
Yayo Suarez tiene problemas más cercanos, si se quiere, que Petri. Es intendente de una ciudad compleja en la que se amplifican los problemas por su condición de capital y centro neurálgico, político, judicial, administrativo y comercial del Gran Mendoza.
Un incendio como el de Zapata Goma, obras interminables de empresas de servicios como Aysam en arterias centrales de la ciudad, la mayor cantidad de personas en situación de calle o incluso los hechos cotidianos de inseguridad hacen que quien más, quien menos, mire para el lado del intendente.
Suarez está concentrado en la gestión capitalina y mastica impertérrito los caramelos de madera que le van apareciendo. Habría tenido una conversación con Alfredo Cornejo respecto de temas mutuos de gestión y sobre bajar el perfil de eventuales candidaturas. Algo que el intendente comparte. Entiende a la perfección que pensar en cargos políticos ahora es la casta.
Últimamente el intendente Suarez recibe las malas noticias sin protestar. Luego de tener abierta una instancia de negociación política con el gobierno provincial por la actualización del “fondo compensador” creado en 1995 para la Ciudad de Mendoza (hoy serían apenas 13 millones de pesos anuales), en la casilla de correo institucional del intendente aterrizó la semana pasada la notificación de un decreto provincial, donde lo mandan a una comisión bicameral legislativa -“que no existe” dicen las fuentes-, a reclamar la actualización de este fondo.
Ese decreto lo habrían firmado el propio Cornejo y el ministro de Economía Víctor “Peque” Fayad. Los Suarez son militantes de los estoicos. De paso, Yayo se reúne una vez por semana con el senador y ex gobernador Rodolfo Suarez, quien además es su tío. Lo aconseja y le atempera los enojos. También ha compartido uno que otro café con Julio Cobos, otro ex gobernador en el Congreso de la Nación.
El intendente está practicando el “submarino”. Para que no lo vean venir mientras le cascotean el periscopio. Pero todas las semanas se está reuniendo con grupos de radicales que le manifiestan su apoyo.
Las opciones de Alfredo Cornejo
En un país en el que todo, absolutamente todo puede pasar, Cornejo cree en aquella fábula del “Caballo que habla” que ya hemos relatado.
El cuento dice que había un rey muy amante de los caballos. Tenía un ejército de mil cuidadores para sus tropillas. Pero un día murió su alazán preferido y por ello mandó a ejecutar al peón que lo cuidaba. El hombre, atribulado y con la horca en el cuello, logró convencer al monarca de que podría enseñar a hablar a otro caballo en seis meses, lo que le daría fama y poder en todo el universo conocido. Así es que el rey lo liberó. Luego, el afortunado explicó a sus amigos que en seis meses podría morir el rey, morirse él, o incluso el caballo aprendería a hablar. Todo es posible.
Probablemente el gobernador administrará las opciones electorales de Cambia Mendoza el año que viene, y luego, en 2027. ¿Qué le impediría ofrecerle a Luis Petri que encabece la lista de diputados nacionales el año que viene? Sería una suerte de conjunción entre radicales, libertarios, liberales varios… Claro, sería difícil que el ministro de Defensa de la Nación acepte. Salvo que se lo pida Javier Milei, de excelente relación con Alfredo Cornejo. El Presidente necesitará de espadas afiladas en el Congreso para seguir su plan de reformas.
¿Para 2027? Desde la visión del grupo gobernante no se agotan en Petri o Yayo Suarez las posibilidades de una futura candidatura a la gobernación. Podrían ser opciones Natalio Mema, Tadeo García Zalazar o Jimena Latorre. Incluso algún otro ministro. Con un peronismo muy desmoralizado y borrado del mapa, las chances oficialistas se multiplican incluso para un cisne negro dentro del oficialismo.
Pero además, para las elecciones falta un siglo. Tanto tiempo que incluso el caballo de la fábula podría aprender a hablar en inglés.