El libro de Alejandro Rúa no cuenta los 30 años que han pasado del atentado, sino los primeros 30 días. No es casual ese recorte, ya que ese primer mes marcó prácticamente toda la investigación sobre el atentado. De hecho, el autor es una de las personas que más acceso ha tenido a la documentación sobre el atentado, lo que ha aprovechado para escribir sobre los acusados, el poder y cómo fue la investigación judicial tras el ataque del 18 de julio de 1994.
En el libro, Alejandro Rúa, que fue secretario ejecutivo de la Unidad Especial de Investigación creada por el gobierno nacional en 2001, abogado querellante de víctimas del atentado y defensor en el caso del memorándum de entendimiento con Irán, cuenta como el Estado argentino desoyó las advertencias, el funcionamiento que tuvo la SIDE y el gobierno de Carlos Menem, los preparativos del atentado y como todo eso posibilitó que existiese un atentado que se podría haber evitado.
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Y es que, como cuenta Rúa, muchas de las personas que están señaladas de haber participado en el atentado a la AMIA no eran desconocidas. “Muchas de ellas ya eran investigadas por el atentado a la Embajada de Israel”, explicó el autor, que señaló que tanto el Mossad como otras agencias habían advertido sobre ellos y sus movimientos y que podría haber un atentado similar al ocurrido dos años antes.
“El relato continúa y termina con la primera imputación. En esos días se elevó una primera maniobra de inteligencia con una solución falsa. Estos 30 días permiten presentar un relato claro de cómo fue el atentado, pero también de cómo se actuó antes y después”, explicó el autor del libro.
De hecho, todo lo que señala Rúa en su libro, coincide con el fallo reciente de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en donde le atribuye responsabilidad al Estado por el atentado a la AMIA al ignorar las alertas y no hacer el seguimiento que correspondía sobre los sospechosos, pero también sobre la investigación posterior. Sin duda alguna, un ataque que cuenta con varias páginas negras en la historia y por eso mismo, el libro “30 días. La trama del atentado a la AMIA” es un libro necesario.